La meteorización consiste en la disgregación de las rocas y minerales que las forman. Se produce por la acción de los agentes atmosféricos (el agua, principalmente) y por la biosfera (seres vivos), principalmente. Además también encontramos como agentes algunos tipos de sales y otros compuestos.
TIPOS:
Distinguimos dos tipos de meteorización: física y química.
Meteorización física: se trata de la aparición de fracturas y grietas en las rocas. Hablamos así de una fragmentación, en la que no se altera la composición. Distinguimos, a su vez, varios tipos de meteorización física:
-Gelifracción/crioclastia: en una fisura se introduce agua, que se congela y da lugar a hielo. Este tiene mayor volumen, dadas las características anómalas del agua (las partículas de hielo se disponen siguiendo una estructura geométrica que provoca una expansión, frente al estado líquido). Tenemos el mismo espacio que teníamos para el agua con el hielo, por lo que aparecerán fuerzas que abran la roca.
Es lógico que la crioclastia se produzca en aquellas zonas en las que el agua puede aparecer en forma de hielo, rondando la temperatura los 0 grados centígrados.
Podemos comprobar los efectos de la gelifracción en los llamados canchales: grandes acumulaciones de rocas generadas por la caída de trozos de rocas separadas por este proceso en las laderas de las montañas.
-Haloclastia: es característico de zonas costeras, donde, a causa de las mareas, el agua del mar se queda en las grietas de las rocas, donde se evapora dejando la sal, que precipita y abre grietas según un efecto cuña.
-Termoclastia: en este tipo meteorización se produce una expansión diferencial de los distintos materiales que conforman la roca. Esto se produce debido a que estos componentes se dilatan de forma diferente con el aumento de temperatura, pues son diferentes y tienen diferentes características físicas. Esto produce distintas fuerzas, que hacen saltar los componentes.
-Meteorización biológica: la acción de los seres vivos también fractura y disgrega los materiales que conforman las rocas. Ejemplos de esta acción son el crecimiento de las raíces de los árboles, los túneles que efectúan los topos, las madrigueras de los conejos o los termiteros que realizan las termitas.
Meteorización química: en este tipo de meteorización sí que varía la composición de los componentes. Esto es, los compuestos sufren un proceso por el cual darán lugar a otros compuestos. También distinguimos diferentes tipos:
Disolución: una roca también puede disolverse por efecto del agua. Un ejemplo de esto son las rocas calizas. También el yeso puede disolverse.
Podemos comprobar los efectos del proceso de disolución en los lapiaces, también llamados lenares. Estos son surcos de diferentes tamaños que presentan calizas y yesos por efecto de su disolución en agua.
Carbonatación y descarbonatación: la carbonización es un proceso químico por el cual las rocas calizas se disuelven. Las rocas calizas están formadas por carbonato de calcio, que es insoluble (y por lo tanto no puede disolverse). Pero existe un proceso químico por el cual el carbonato se combina con agua y con dióxido de carbono y da lugar a bicarbonato de calcio, que sí es soluble y puede disolverse.
Esta reacción es reversible, lo que conocemos como descarbonatación. El sentido de la reacción dependerá de las condiciones de presión y temperatura, sumado a la cantidad de dióxido de carbono presente en la atmósfera.
Un ejemplo de carbonatación es la creación de estalactitas y estalagmitas. El agua con bicarbonato de calcio se filtra hasta la cueva. El bicarbonato precipita y da lugar a carbonato de calcio en la punta de la estalactita, por las diferentes condiciones con el exterior.
Hidratación: la presencia o no de agua produce efectos en materiales expansivos como las arcillas. Estas aumentan de volumen y de plasticidad con la existencia de agua, mientras que si no hay se contraen y forman las llamadas grietas de retracción.
Oxidación: la oxidación es un tipo de reacción química por la cual los materiales se combinan con el oxígeno, elemento muy reactivo capaz de combinarse con una gran mayoría de los materiales. Las rocas también pueden sufrir el proceso de oxidación, ya esté el oxígeno disuelto en el aire o en el agua. Es característico porque da tonalidades rojizas a las rocas.
Meteorización química biológica: los seres vivos también pueden llevar a cabo un proceso de meteorización química. En este caso los seres vivos crean sustancias químicas (como sustancias corrosivas ácidas) que degradan las rocas.
Como ejemplos podemos poner plantas como musgos y líquenes y animales como dátiles de mar (que segregan sustancias disolventes para crear cavidades, como en la fotografía) y lapas.
Superinteresante. Muy bien explicado, me ha encantado :).
ResponderEliminarGracias!